miércoles, 28 de marzo de 2007

Cronicas de Buseta II: Una pregunta de Etiqueta...


Esta crónica es un HIT, de la Dra. Angelita Perversita, ella no necesita presentación. Sin más bla, bla, (TODO CON LOS DEBIDOS PERMISOS NO GUACHES)

Sexualidad y transporte en el Día sin Carro, ¿un problema de salud pública?

Los espacios de la ciudad establecen parámetros de acuerdo a los cuales los ciudadanos se relacionan y en esa medida, los vehículos de transporte público se erigen como uno de los escenarios fundamentales del actuar cotidiano.

Ayer, 1 de febrero de 2007, se llevó a cabo en Bogotá la novena edición del Día sin Carro, jornada en la que sólo se movilizan los vehículos de transporte público, de entrega de mercancías, ambulancias, rutas escolares y en fin, aquellos que necesariamente deben funcionar (como los carros de algunos funcionarios públicos, los de escoltas...).

Esta jornada se llevó a cabo en un clima en el que el tema de la movilidad es el florero de Llorente de la ciudad y bandera obligada de las campañas electorales, tan madrugadoras ellas, por la alcaldía.Se habla de si es mejor Transmilenio o tranvía por la séptima, de la necesidad de reducir el parque vehicular de particulares, de la sobreoferta de taxis... temas de importancia capital pues su actual estado influye en uno de los aspectos fundamentales de la vida de los bogotanos: su cotidianidad sexual.
El pasado Día sin Carro, gracias al considerable aumento en el número de personas que debían movilizarse en los vehículos públicos, este aspecto cobró especial relevancia para mí y sé que para un gran número de ciudadanos.
El evidente verano –que para algunos trasciende del ámbito climático al personal– ha hecho que el ambiente de los buses se caliente, y esto sumado a la gran cantidad de personas que usan la misma ruta que yo para volver a casa ha dado como resultado extraños tipos de contacto físico.
A eso de las seis de la tarde de ayer salía yo de la oficina con dos compañeros ya para irnos a la casa y nos paramos a esperar el bus en la 100 con 9ª; esperamos un buen rato un bus que estuviera “sentable” o por lo menos habitable, nos subimos felices de la pelota y nos hicimos hacia atrás para evitar cualquier inconveniente (incluso tuvimos la precaución de cuadrarnos en orden de salida). Como a las dos cuadras desocuparon un asiento y la niña (mi mejor amiga) con la que íbamos se sentó, cambio de posición que me dejó ubicada unos pasos antes de la salida; y no fue sino quedar ahí parada yo para que el hijuemadre bus se empezara a llenar. Y empieza toda esta vaina de la estrujadera y la apretadera y los elementos extraños que rozan la retaguardia de una, que en medio de todo, es una chica decente. Y preciso el man que estaba dándome las espalda no hacía sino moverse de manera tal que nuestras nalgas quedaran ubicadas de manera especular. Y cuando me corría para otro lado, estaba el portafolio del estudiante de diseño que se me introducía entre las piernas con grave riesgo de romperme las medias. Y ya al ir llegando al puente de la 30 un señor no tenía espacio por donde pasar y la falda se me enrolló hasta la cintura. Ole, y ni una caricia, ni un “hola”, sin preguntarle a uno ni el nombre carajo...Pensaría uno que este tipo de situaciones se presentan sólo en días como ayer.

Pero no, todos los días hay que bajarse del Transmilenio y salir corriendo a hacerse una prueba de embarazo.

Lo que pasa es que ayer la cosa tocó un punto crítico. Yo estoy totalmente de acuerdo con jornadas como el Día sin Carro, sobre todo por el lado de la contaminación y también porque pone en evidencia que el problema de la superpoblación de carros particulares es algo que hay frenar necesariamente. En lo que no estoy de acuerdo es en que al montarse en el bus uno tenga que prepararse sicológicamente para toda esta suerte de contactos corporales...

  • ¿Por qué carajos, si hay una cantidad de buses tan berraca tiene uno que padecer de esta forma?

  • ¿será que el bus va a ser necesariamente el lugar en el que uno conozca al padre de sus hijos, literalmente?

Sé que hay personas a las que nunca les pasa eso, que su busetica siempre va desocupada... pero es que eso es la excepción y pasa por que las hijuemadres rutas están muy mal distribuidas y eso sumado a que no falta, no falta el morboso...La solución a esto podría ser asumir el momento de transportarse como parte integral de la rutina sexual, es decir, relajarse y disfrutarlo (por lo que el chofer debería darle a uno un preservativo con las vueltas). O de verdad, organizar mejor la distribución de las rutas, que la gente haga un uso más consciente del transporte público desde su distribución espacial para empezar y continuando con las rutas utilizadas (porque en el Transmilenio por ejemplo, no falta el que va hasta el portal pero se va parado en la puerta o el que coge el expreso por pura pereza porque va con tiempo y va cerca pero le da mamera esperar el corriente), y sobre todo:

¡DEJAR LA MORBOSEADERA!... Y a va siendo hora de que dejen de restregárselo a una, no hay derecho... y sin una caricia, sin un “hola”, sin preguntarle a uno ni el nombre, carajo...

Espere el próximo MIERCOLES. Crónicas de Buseta III: Maria () La Buguetana. Esto sólo le pasa a ella.

FOTOS CORTESIA: FLICKR, Search: TRANSMI.

P.S: Saben ustedes quién es JAIRO PINILLA y cuál es la TAXITECA? Averigue:

http://victorsolano.com/2007/03/26/la-taxiteca-de-jairo-pinilla/#comments

5 comentarios:

  1. Bueno, comentario en la noche (de aquí) como lo prometí. Veo que el post original es de Perversita, así que creo que los comentarios irían para ella...

    Perversita(por intermedio de don Ciudadano), la próxima que te manoseen, siempre está la opción de pegar el grito y llamar la atención de los que van al lado, por lo menos el personaje quedará como el sátiro más grande del mundo.

    Y lo de la mala distribución de los buses viene siendo un problema de siempre con el transporte público bogotano, lo mismo que el señor arrancando sin que uno se haya subido siquiera al bus, o el vallenato o reggaetón a todo volumen, o la gritadera para que el chofer lo deje a uno donde uno le pidió, incluso si es un paradero... Estas bellezas me hacen adorar a Transmilenio con todos sus problemas porque pensar en que estos lindos busecitos sean de nuevo nuestra única opción me da pánico.

    Ah! Y hoy en El Tiempo salió otra vez que la sobreoferta aumentó... Vaya uno a saber dónde es que están todos esos buses vacíos...

    Y esto para don Ciudadano: Tarea con respecto a voto hecha, ojo a la respuesta del consulado: LAS ELECCIONES SON EL OCTUBRE. AUN NO SE HA ABIERTO PERIODOS DE INSCRIPCION DE CEDULAS. Muy ilustrativa ella, me despejó todas las dudas, ala! Además se les olvida el asunto aquel de que escribir en correos electrónicos en mayúscula es como si estuviera gritándole a quien lo lee. Espero respuesta de la tarea dos. Y que saludos! Y que gracias! jejeje.

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  2. Para comunicarle a Angelus que las inscripciones para las elecciones de oCTUBRE, YA SE ABRIERON AQUI EN BUCARAMANGA.

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  3. Bueno, mis sinceras felicitaciones:

    Primero que todo a Angelita Perversita, muy buena su historia, ese es el espíruto de las cróniKas de buseta. Y siendo víctima diaria de la situación anteriormente descrita me identifiqué totalmente.

    Segundo al ciudadano potasio por la iniciativa de juntar estas historias, ya estoy esperando la del próximo miércoles jaja

    Ah y el término "La Buguetana" jaja buenísimo, lo voy a seguir usando.

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  4. Hola amiguis, jajjaja...
    esta super chevere, aunque la crónica ya la había leido en el blog de angelita....uichss definitivamente cada día se vuelve mas difícil salir invicto del transporte urbano...pero en fin, en esta cuidad estamos con todo y sus cositas...
    que chevere que estes cumpliendo tus metas blogueriles,
    Un saludillo.

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  5. A todos los que han pasado por acá y han leído mi pequeño y pobre (pero honrado) relato, muchísimas gracias.
    Y a tí K-riño, pues gracias ala, no sólo por publicar esto sino por ser quien eres, por estar ahí, por todo.
    Un beso desde el territorio perversito para el felino mayor.

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