jueves, 5 de abril de 2007

Crónica de Buseta iii: Mejor Tarde que NUNCA...

Esta Crónica es de la niña Maria ( ), bugueña ella, linda, inteligente, uniandina, mejor dicho...objeto del deseo de más de uno...aunque esto NO SOLO LE PASA A ELLA

Cavilaciones banales a bordo del transporte público…



…o pensando idioteces en el bus. Miércoles 8:30 a.m. (creo), me desperté a la hora en la que tendría que estar entrando a la primera clase, de modo que tuve que bañarme y arreglarme en tiempo record para poder llegar a la segunda. Que frío que hace, como siempre, ya llevo una canción esperando en el paradero y nada que pasa un bus que me sirva.


No me había fijado, el tráfico por la séptima a esta hora es menor que cuando voy a clase de 8. Por fin un bus azulito, mi salvación, lo malo es que tendré que viajar de pie un buen rato. Que bien, un puesto libre, alguien me toca el hombro, me quito el audífono derecho para entender que me está diciendo el desconocido “¿Esto es tuyo?”, estira su mano y me muestra el botoncito de Mafalda de mi maleta, lo tomo sonriendo al desconocido y se baja del bus. Un día de estos voy a botar ese botón, antes no había problema con él, incluso era difícil quitarlo para lavar la maleta, pero ahora se cae muy seguido, hay que hacer algo.


¿Será que voy tarde?


Prefiero no consultar el reloj y mirar por la ventana, ha salido el sol con todas sus ganas y me está dando en toda la cara, pero eso es mucho mejor que aguantar frío. Suena la canción más cortavenas de los últimos años: ¿Qué estás buscaaaando de mí? Dime que puedo darte que nooo te haya dado, no creo merecer todo esto que está pasaaaaando… pobre tipo, sufre del popular delirio de limpión de cocina.


Los buseteros son muy brutos, pero los taxistas son campeones ¡Mierda, no me puse aretes!


Menos mal que llevo alrededor de 40 pares en esta cajita, lo bueno de andar de rebusque, creo que estos me quedan bien.


Siempre es rico encontrarse un bugeño en el bus, como me pasó ayer por la tarde, la gente no me cree cuando le digo que hay un bugueño en cualquier parte del mundo. Ni una sola palabra, ni gestos ni miradas apasionadas… aunque la mayoría diga que que boleta Paulina Rubio, se pone uno a ver, y se da cuenta de que se sabe mínimo una canción de ella.


¿Qué estarán haciendo en Análisis Químico? Tengo que acostarme más temprano, he faltado dos veces en menos de una semana.


Que envidia de los javerianos, el bus los deja al frente de la universidad, eso me recuerda un chiste: ¿Cuál es la carrera más difícil de pasar en la Javeriana? ¡La séptima! jajaja (ruido de grillos en el fondo) bueno sí, estuvo malito.En el radio acaban de preguntar qué será peor: ¿Una semana borracho o una semana enguayabado? Mmmm, no sé, prefiero una semana ebria, pero uy no, que cantidad de burradas que puedo hacer, mejor ninguna de las anteriores.Voltea el bus, una prostituta espantosa jura que se ve sexy con esa pinta, espera conseguir algún cliente en la puerta de una casa vieja, y al doblar la esquina “Jardin infantil la Alameda” o algo así. Más atrás, al lado de una “whiskeria” queda la Panadería “Es mi pan 2003”, ¿a quién se le pudo haber ocurrido ese nombre?


El radio ya no sintoniza nada, pasemos este aparato a mp3. Me gusta esta canción: Me muero por besarteee, dormirme entre tu boca, me muero por decirteee, que el mundo se equivoca… que buena voz la de la vieja de la quinta estación. Por la ventana veo la calle 19, primer recuerdo que tengo de Bogotá.


Bueno, miremos la hora a ver que tan tarde voy, ¡Mierda, no me puse reloj! ¿Dónde tengo la cabeza? Momento, aquí está, encima del cuello y debajo del pelo.


A propósito, tengo que ir a objetos perdidos a ver si alguien encontró mis gafas.“Última parada”, lo malo de este bus es que me deja aun más lejos que los demás, ni modo, a caminar,


¡Uy, hola! No me había fijado que el del asiento del lado era tan lindo, en fin, ya se bajó.


Hay dos canciones de aquí hasta el salón de biología, suena Maná, esto sí es toda una terapia… Bendita la luz, bendita la luz de tu mirada, bendita la luuuz… snif, me recuerda a mi amorcito.Verdad que hoy es miércoles de ceniza, muy bueno, porque eso significa que faltan sólo 40 días para pasar una semana en mi casita. Es raro ver a todo el mundo con mi apellido pintado en la frente, más tarde voy a ir a que me lo pinten a mi también.


¿Qué hora será?


Tengo que mirar en el celular ¡No puede ser, también deje el celular! ¿Qué más se me habrá olvidado?*


yo sé que es muy temprano para decirlo, pero ¡Esto sólo me pasa a mí! ¿Y este qué me mira? ¿Nunca se ha quejado en voz alta en plena calle? Me preocupa más no saber la hora que quedarme incomunicada. Buenos días, la maroma de siempre para encontrar mi carnet en la maleta y poder entrar a la universidad, ya estoy cansada, tengo el estado físico de un paralítico. Acortemos distancias atravesando la cancha de micro, agh están jugando y yo le tengo pánico al balón, pero bueno, sobreviví. Paso por el salón de Análisis, ya no hay nadie. “¡Maria.....!”, ese es mi nombre, ¿Quién me llama?, ahh hola, es la amiga de la hermana de un amigo, ¿Quieres aretes? Sí claro, míralos, que importa llegar tarde a clase si hago una venta, ¿Morados? Odio ese color, es el único que no tengo, bueno, esta semana hago unos y te los mando con … “¿Vas tarde?” nooo, es que me gusta llegar 10 minutos después para no presentar el quiz.


Finalmente estoy frente a la puerta del salón, buenos días, no hicieron quiz, me salvé, si que buenas, que perdon, que permiso, ¿Quién se habrá inventado esta forma de acomodar los puestos?, toca levantar a medio salón para poder sentarse. Uy parcial el viernes y no he estudiado nada, en fin.


* La respuesta llegó a las diez de la mañana, cuando descubrí que también se me quedó el horario de clases y no me acordaba donde tenía ecuaciones diferenciales.

3 comentarios:

  1. Que buena crónica de buseta... Esta señorita es talentosa pero distraída.

    Muchos saludes de pascua.

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  2. Ya venía pensando si el tipo que le devolvió el botón no le habría sacado el celu, las gafas y el reloj...

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  3. jajaja eso sí sería el colmo.
    El celular lo deje encima de la cama, las gafas aparecieron una semana después y el reloj lo deje en la mesa de noche.

    Potasio ¿por qué andas tan perdido?

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